Con el nombre de «ciudad esmeralda» se conoce a Seattle (USA), debido a las grandes zonas de naturaleza y bosques que la rodean. Nada extraño, ya que sólo 150 kilómetros la separan de la frontera con Canadá, y está rodeada por grandes Parques Nacionales como el Olympic, el North Cascades, el Mount Rainier o el Mount Baker. Está situada sobre una lengua de tierra que separa el gran lago Washington y la bahía de Puget Sound, que forma parte del Océano Pacífico. Así que, además de una gran ciudad americana (con todas sus ventajas e inconvenientes), podemos hacer un montón de excursiones organizadas por los alrededores o alquilar un coche y hacerlo por nuestra cuenta.


También se la conoce como «Rainy City» (ciudad de la lluvia) debido a que llueve muy a menudo o «Gateway to Alaska» (puerta de entrada a Alaska) por su buena comunicación con este estado americano. De hecho, fue una de las razones para visitar Seattle. Recordemos que decidimos pasar unos días aquí después de nuestra ruta por Alaska y Hawaii. Tras un largo viaje, siempre intentamos reservarnos unos días para, antes de volver a casa, pasar unas jornadas en una gran ciudad y no hacer más que caminar sin rumbo fijo, comer bien y disfrutar de una gran urbe.

Y prácticamente íbamos sin haber leído nada de ella, porque nos bastaba con pasear por su centro (o Downtown) y poco más. Esto no quiere decir que en los 4 días de visita no saliéramos del hotel; ¡¡al contrario !!! Caminamos un montón y recorremos calles y avenidas, absorbiendo la vida de una gran ciudad estadounidense, que es algo que nos encanta hacer. Lo reconocemos, nos gusta mucho el turismo americano (que no quiere decir pro-yanqui).





Sobre todo se convirtió en un agradable final de ruta, debido al buen tiempo que encontramos. 4 días de auténtico sol a pesar de ser octubre y encontrarnos en una de las ciudades más lluviosas de la costa oeste. De hecho, algunos de sus habitantes nos lo habían dicho: – «Qué suerte tenéis, chicos. En esta época es extraño tantos días seguidos de sol». Si incluso una de las frases célebres de la ciudad, publicitadas en magnets lo dice:

Nuestro hotel es muy recomendable. El Five (ver nuestra opinión en Tripadvisor), destaca por sus instalaciones modernas y unas confortables habitaciones. Está situado en un agradable paseo a 5 minutos del centro, en plena 5th Avenue, y a unos pasos de Pine Street, una de las calles con más comercios, restaurantes y vida de la ciudad.
Probablemente lo más conocido por los turistas es la Space Needle (aguja espacial), una torre y mirador de 184 metros de altura, todo un icono de la ciudad. Es el símbolo más reconocible, y sale en un montón de series y películas. Frasier sucedía en Seattle, así como Anatomía de Grey (en la mayoría de planos de la ciudad siempre sale la torre), o pelis como la saga Crepúsculo. El recinto ferial que rodea la torre se ha convertido en el llamado Seattle Center, y además de parques y jardines, encontramos Centros Cívicos, deportivos, y museos.
Quizá el más conocido es el EMP (Experience Music Project), un museo interactivo dedicado a la música (no podemos olvidar los grandes músicos y bandas nacidos en la ciudad –Jim Hendrix, Nirvana, Pearl Jam…-) y con un reconocido estilo arquitectónico (diseñado por Frank Gehry). A nosotros, lo que más nos sorprendió fue el museo Glass Garden del artista Dale Chihuly, con obras realizadas en vidrio y expuestas en un gran jardín.


Otra cosa muy conocida en la ciudad es su monorraíl. Una especie de metro que circula por una estructura aérea y comunica precisamente la zona de la torre Space Needle y el Downtown. El trayecto que cubre no es muy largo, y se puede hacer también en agradable paseo.
Pero a nosotros, lo que más nos gustó de la ciudad es la zona del Pike Place Market. Abierto todo el año, este mercado y sus alrededores, es una de las atracciones más emblemáticas de Seattle. Fruta, verdura, muchas flores, ropa, joyería, regalos… Un montón de tenderetes llenan el mercado. Pasear es una delicia. Pero seguramente lo más conocido son sus pescaderías, todo un espectáculo para los turistas. Y la reina de todas ellas es la Pike Place Fish Market.
El pescado vuela literalmente en manos de los pescaderos, que se los lanzan entre ellos ante la mirada sorprendida de la gente. Todo un espectáculo. Además, en el mercado podemos encontrar más de un lugar para comer. La calle exterior llamada Pike Place está llena de pequeños restaurantes y cafeterías. Precisamente allí encontramos el primer Starbucks que se fundó en el mundo y que más tarde originó el gran imperio de las cafeterías. Una gran cantidad de turistas mitómanos hacen cola a diario para decir que se han tomado un café allí. Visitarlo el fin de semana es garantía de multitud, pero el ambiente es genial.




También es conveniente caminar por la paralela Western Avenue y tomarse un descanso en el Victor Steinbrueck Park, una zona ajardinada donde podemos sentarnos en el césped mientras comemos un sandwich y disfrutamos de unas buenas vistas del mar. Enfrente encontramos la zona de los muelles (Piers), siempre llena de vida en cualquier ciudad americana, aunque los más turísticos los encontramos entre el Pier 50 y 60, en un corto paseo hacia el sur del mercado.
Allí tenemos el Seattle Aquarium, el Waterfront Park, algunos de los restaurantes más turísticos de la ciudad, como el Crab Pot o el Elliott’s Oyster House, donde podemos degustar un fantástico marisco (el cangrejo gigante es el rey) y ostras. Ah! Y vimos la nueva gran atracción del puerto, la enorme noria (53 metros) Seattle Great Wheel, en el Pier 57, construida en el 2012 y que es una de las más altas de todo Estados Unidos.



Por cierto, estas son algunas recomendaciones de restaurantes que probamos y nos parecieron ideales para compartirlas:
- Icon Grill. Buena comida estadounidense. En el Downtown. 5th Avenue con Virginia Street
- P.F. Chang’s China Bistro.. Un chino de mucha calidad. En el centro comercial Westlake Center. 400 de Pine Street.
- Lola. Mucha variedad en un lugar siempre lleno de gente. 4th Avenue esquina Virginia St
- Japonessa Restaurante japonés de categoría. Buenísimo !! 1st Av esquina Union St.
- Dahlia Bakery. Un horno de pan y pequeña cafetería ideal para desayuno / merienda. Al lado tienen un restaurante de los mismos propietarios: Dahlia Lounge. 2001, 4th Avenue
Si continuamos bajando por el puerto, llegaremos hasta la estación de ferrys, donde podemos embarcarnos en algún barco y visitar alguna de las islas que se encuentran frente a Seattle. Nosotros fuimos a la aventura y sin conocer destino tomamos uno de los ferrys para ver algo diferente. La casualidad hizo que descubriéramos el trayecto hasta Bainbridge Island, y pudiéramos ver un lugar muy bonito, con unas vistas al atardecer geniales !! (Post en preparación)


Y si nos desplazamos un poco más, hacia el este de la ciudad, divisaremos el principal estadio deportivo, el CenturyLink Field. Con una gran tradición deportiva, allí juegan los equipos Seattle Seahawks de fútbol americano y los Seattle Sounders, de la liga principal de soccer, es decir, nuestro fútbol. Este equipo tiene una de las aficiones más importantes del país, y tuvimos la ocasión de comprobarlo en directo. Los días de partido se reúnen horas antes cerca del estadio (entre Occidental Park y Main Street) y montan una buena celebración para ir juntos hasta el campo (ver nuestro post de esta fiesta).


Más al noreste encontramos la zona de Central Business District, llena de oficinas y bancos. Seguro que los días laborables debe estar llena de gente y con buenos lugares para comer, pero nosotros la visitamos por casualidad un domingo y como podéis suponer, no había ni un alma por las calles (es lo que tiene ir sin rumbo fijo…)


Relativamente cerca, podemos adentrarnos en el típico barrio chino que tiene toda gran ciudad americana. Y además de Chinatown, también os dejamos los nombres de otros barrios, como Ballard, Bellevue, Capitol Hill, Fremont … La lista es larga, ya que el área metropolitana de Seattle tiene casi 4 millones de habitantes. Este mapa localiza los puntos a los que hacemos referencia en el post:
Uno de los barrios que más nos gustó es el de Queen Anne (próximo post). El nombre del distrito proviene del estilo arquitectónico típico de muchas de las primeras casas de esta zona, que son carísimas y lujosas mansiones históricas. Muchas están situadas sobre una colina donde también encontramos Kerry Park, un bonito lugar donde despedirse de la ciudad. Desde allí, tendremos una de las mejores vistas, la que buscamos los turistas para quedarnos con una visión global de la ciudad de Seattle, la ciudad esmeralda …

Quina bona pinta fa Seattle!!!! Crec que hauré d’aprofitar per acostar-m’hi mentres hi visquin uns amics… 😉 Per cert, espectaculars les fotos, com sempre… En especial les nocturnes
Homeeeeee, si tens amics a Seattle no pots desaprofitar-ho!!!! Encara millor, perquè sempre és un plaer deixar-se aconsellar per gent que viu en una ciutat. Són els que de veritat la coneixen.
Gràcies com sempre pel teu comentari i per valorar les fotografies.
Una abraçada!!
Doncs ens heu fet agafar moltes ganes d’anar-hi! Francament només en coneixia el que es veu a les sèries, on sempre està diluviant, i m’havia semblat una ciutat molt grisa. Res a veure amb el que ensenyeu…
I entenem perfectament què voleu dir que quan dieu que us encanta el turisme americà que no pro-ianqui. A nosaltres ens passa el mateix!
Ja hem dit que la bona climatologia ens va ajudar un munt. Aquestes grans ciutats, si plou molt, no són el mateix, perquè l’aigua no ajuda gens a fer grans caminates sense rumb fix.
Però si teniu la oportunitat, segur que us encanta!!
Gràcies pel vostre comentari
Serà qüestió de començar a estalviar, quin lloc! I vau tenir sort amb el sol?? No m’estranya! el lloc no podia decepcionar la millor parella fotògrafa i viatgera que tenim per aquí a la xarxa! he he he. M’encanta això que dieu del brunch, que veig que també és un delit per a vosaltres, podríem adoptar-ho a casa, això! Molt boniques les fotos. Tot i que provoca cert vertígen veure que hi ha ciutats tan grans al món… petons!
Quin millor plaer Marina, que aixecar-te no molt d’hora, en una magnífica ciutat, buscar un bon restaurant o cafeteria, i fer un «brunch». Genial!! Després ja es veuen amb uns altres ulls les coses (l’estomac ple ajuda molt), jejeje.
Com moltes grans ciutats americanes, Seattle és enorme, però només voltant pel centre en transport públic, els dies passen tan ràpid que quan t’adones ja és hora de tornar a casa.
Gràcies pel teu comentari!!!
Molt xulo l’article i les fotos! Quins records! La Space Needle, el mercat del peix al costat del port… Va ser el meu primer viatge a EE.UU. i amb el vostre article m’han vingut ganes de tornar-hi 🙂
Moltes gràcies pel vostre comentari, nois.
Seattle ens va sorprendre més del que ens esperàvem, i és una ciutat que recomanem a tothom.
Una abraçada