Habita un animal en Islandia que te roba el corazón sólo con verlo. Hablamos de los simpáticos puffins, un ave marina que frecuenta los fríos mares de Europa del Norte.



Los meses de junio, julio y agosto son los mejores para observarlos.
Los meses de junio, julio y agosto son los mejores para observarlos en Islandia, y aunque pueden ser vistos en muchas partes del país, hay una zona donde avistarlos es toda una experiencia: la Reserva Natural de Ingólfshöfði.
El problema principal es el acceso a esta zona, ya que se trata de un promontorio aislado en la costa, a medio camino entre Skaftafell, el parque nacional de Vatnajokull; y la famosa laguna de hielo de Jökulsárlón. Antes de llegar a la cima y admirar las fantásticas vistas de los acantilados, se debe atravesar más de 5 kilómetros de terreno pantanoso, arena fina y agua que llega a cubrir más de medio metro. Se puede hacer a pie, pero nosotros proponemos otra forma: ¡en tractor!



Y es que se pueden organizar tours en esta Reserva Natural, y una de las mejores formas de transportarte es el remolque de un tractor, que con sus enormes ruedas atraviesa esta zona de difícil acceso.
La empresa «From Coast To Mountains” es la encargada de hacer estas excursiones, y en un tour de 2’5 horas ofrecen una visita guiada para observar el hogar de cientos de aves marinas que suelen anidar aquí.
Podremos observar sobretodo puffins (frailecillos en español), pero también skuas, una especie de gaviotas de color marrón, que protegen sus nidos con especial agresividad.



Los puffins son reconocibles por sus colores blancos y negros, su llamativo pico de forma triangular, y sus colores rojizos y amarillentos potentes. Estos abruptos acantilados son la mejor zona donde los frailecillos vienen cada año para criar y alimentarse, y podremos observarlos de cerca, aunque siempre se debe mantener un respeto absoluto para no asustarlos ni molestarlos.




Si además de verlos en libertad, os apasiona la fotografía (como es nuestro caso), existe una variante del tour más especializada en capturar imágenes de estos fantásticos animales. Las diferencias respecto a la excursión normal son 3:
- Duración más larga (3’5 horas)
- Menos personas por turno (entre 2 y 12)
- El guía que nos acompaña es un fotógrafo
Descontando el tiempo que necesitamos de acceso a la zona, en realidad estaremos unas 2 horas caminando por la Reserva. La caminata recorre unos 3 kilómetros, y aunque al principio tendremos que subir una pendiente pronunciada de arena y luego un terreno más rocoso, en la cima encontraremos una extensa superficie de hierba, donde conviven los puffins. Estos animales pasean alegremente por el borde y el enorme desnivel del acantilado, y a menudo salen volando para ir a buscar alimento.




Realmente tuvimos mucha suerte en nuestra experiencia, porque estuvimos completamente solos. A pesar de ser finales de junio, no había nadie más el día que reservamos para nuestra excursión. Einar fue el encargado de hacernos de guía, llevándonos a la cima del promontorio.
Él es fotógrafo, y eso se notó. Nos llevó a lugares ya conocidos por él, con su equipo fotográfico siempre encima, y tomando imágenes de las aves (aunque el debe visitar la zona muchísimas veces cada año). No es la primera vez que una empresa hace pasar una simple visita guiada por un tour fotográfico para encarecerlo, pero aquí no fue el caso. Realmente la conversación y los consejos que nos ofreció Einar fueron todo un acierto.




Y es que combinar la afición por los viajes y la fotografía en un solo lugar, es lo que nos hizo vivir una experiencia emocionante.
MÁS INFORMACIÓN:
TOUR Reserva Natural de Ingólfshöfði. Empresa From Coast To Mountains | ||
PUFFIN TOUR | FOTO TOUR | |
DURACIÓN | 2’5 h | 3,5 h |
PRECIO | 65 € | 145 € |
TEMPORADA | mayo a mediados de agosto | mediados de junio a principios de agosto |
PARTICULARIDADES | Grupos más amplios (más de 20 personas)
Observación de aves Paseo guiado |
Grupos reducidos (entre 2 y 12 persones)
Centrado en la fotografía Guía fotógrafo |