«Y por qué no vamos más a la montaña?» Esta es la misma pregunta que nos hacemos al regresar de una ruta de naturaleza. Nos encanta la tranquilidad que se respira, las excursiones y paseos, los paisajes montañosos … Pero no siempre disponemos del tiempo necesario, claro. Recién regresados de una fantástica ruta por el Pirineo francés, aprovechando la última nieve de la temporada, queremos explicar detalles de unos lugares realmente espectaculares. Nada de esquiar. Simplemente excursiones a pie, visitas a pequeños pueblos en coche, y comer mucho y bien.

Ruta en coche, pasando la frontera francesa hasta el pueblo de Arcizans-Avant, donde nos instalamos en un hotelito de aquellos que tanto nos gusta a nosotros. La Maison de Beatrice (-la recomendamos- ver nuestra opinión en Tripadvisor) sólo dispone de 2 habitaciones, y la familia que lleva el negocio, Chrystelle, Stéphane y su hijo Tom, se vuelcan en ofrecernos un trato excepcional.
¿Y qué podemos ver? Pues muchos pueblos con encanto, situados entre verdes valles y rodeados por los picos de los Pirineos. ¿Se puede pedir más? La zona se encuentra situada en el Parque Nacional des Pyrénées, que se extiende más de 100 kilómetros a lo largo de la frontera con España, del Valle de Aspe al Valle de Aure, y de hecho, se trata de la parte francesa del Parque de Ordesa.




Vamos en coche, y eso nos facilita conocer los pueblos de alrededor. Argelès-Gazost, Saint-Savin, Pierrefitte… La cocina regional de montaña nos encanta, y uno de los mejores lugares donde comemos durante la escapada, es en el Restaurante Auberge Le Cabaliros. Las 3 generaciones de la familia St. Martin saben lo que hacen, y damos fe de su buenísima cocina.



Una de las excursiones que más ganas tenemos de hacer, es un recorrido por el Cirque de Gavarnie. Este sitio legendario, con sus 17 picos de más de 3.000 metros de altura, es un anfiteatro de roca caliza, donde se encuentra la cascada más grande de Europa (423 metros). Forma parte del macizo del Monte Perdido, y es Patrimonio de la Humanidad.
Dejamos el coche en el mismo pueblo de Gavarnie, y nos disponemos a hacer un recorrido con raquetas de nieve, pero vemos que con buen calzado de montaña también es posible hacerlo. A medida que nos adentramos en el bosque, la nieve va cubriendo el paisaje y el espesor es espectacular para esta época del año (marzo). Lástima no poder hacer todo el recorrido que teníamos previsto, porque el riesgo de aludes es grande, y nos encontramos recomendaciones de no continuar a media ruta. Pero la visión que obtenemos y la agradable excursión de un día soleado ya satisface de sobras nuestros deseos.





También visitamos el pueblo de Cauterets, donde vale la pena ir a la oficina de Información. Allí nos explicarán las diferentes rutas que podemos hacer. ¡Ah! Y en muchísimas tiendas y comercios podremos ver cómo se fabrican de manera artesanal los famosos «Berlingot», unos caramelos de colores muy populares en la zona. Desde este pueblo, llegamos a la estación de esquí de Pont de Espagne, donde se puede practicar esquí nórdico y/o hacer rutas a pie.




Y hablando de pistas de esquí, otro lugar mítico de la zona que visitamos, es el Puerto del Tourmalet, famoso por ser una de las etapas más conocidas del Tour de France. Con la nieve, el Puerto de Montaña está cortado, porque la estación de esquí du Grand Tourmalet lo cruza literalmente. Todavía podemos ver muchos esquiadores bajando por las blancas pistas …


La estación de esquí, situada en el pueblo de La Mongie, también es el lugar de salida del largo teleférico que lleva a uno de los lugares más mágicos de la zona: el Pic du Midi.
A 2.877 metros de altura, el Pic du Midi de Bigorre, es uno de los picos más altos de los Hautes-Pyrénées, y lo que lo hace tan turístico, es su facilidad para llegar a la cumbre. Un teleférico salva en poco más de 15 minutos (en 2 tramos) unos 1.000 metros de desnivel. Las vistas desde allí arriba son increíbles. La visión de los Pirineos nevados es toda una experiencia y en su cima encontramos un gran observatorio que permite a los científicos entender mejor el universo.


Realmente hemos aprovechado muchísimo los 4 días de esta escapada. Incluso nos ha dado tiempo de visitar la ciudad de Lourdes, famosa por su santuario, lugar de peregrinaje entre los fieles.


De vuelta a casa, y antes de pasar la frontera, nos detenemos en pequeños pueblos como Saint Bertrand de Comminges (Haute-Garonne), incluido en la lista de «Les plus beaux villages de France»; Foix (Ariège) con su majestuoso castillo del siglo XI; o Ax-les-Thermes (Ariège) muy popular por sus balnearios de aguas termales.




Quizás es la cercanía de Francia, quizás es que consideramos su cocina como una de las mejores del mundo, o simplemente, que encontramos paisajes y lugares increíbles… Sea como sea, pensamos hacer muchísimas más rutas por este fantástico país.
Mapa de la ruta y lugares visitados más importantes: